Varios días de ausencia narrativa, preparando trabajos finales, exposiciones y parciales.
Desvaneciendome entre lo que nunca va a ser... camino con los oídos atentos al ruido que hay en mi cabeza y los ojos puestos en lo que no ha llegado.
Ser un imposible cuando lo posible se ha perdido en la probabilidad, no sé que me pasa, sólo espero que no pase nada y mucho menos lo que estoy pensando, de ser así lo que sospecho sería certeza y perdería el sentido de misterio, tan necesario para mi ahora.
Me quedan muchas agallas para vivir sola, para vivir 50 años al borde de mi misma (juajuajua) hace falta mucho interés en un punto fijo para no perderse en las posibilidades que como tentaciones alcohólicas son ofrecidas en la bandeja del destino... Heridas? suturas? fisuras? caminos? deseos? transformaciones estáticas en lo que nunca dejará de ser...
Escribir se ha vuelto mi vida, porque todo lo que es pensado tal vez es vivido por otra vida, todo lo que escribo muta en la las casualidades retornantes en otros.
caminando de un lado a otro, siempre a los lugares recurrentes, universidad, de pronto un café, de pronto una cerveza, amigos todos, conocidos nadie ya que nunca avanzaremos más allá en la indagación por un otro en tanto somos desconocidos para nosotros mismos ya que nosotros somos el otro del otro, por lo tanto no hay más remedio de acercarnos con lo perceptible y con lo que nuestro corazón indica.
Otra vez con gripa, otra vez pensando en ellas, en sus cuerpos, en sus cavidades húmedas, en sus lunares, sus tetas y sus coños, en sus bocas sabrosas pálidas y rosas, en sus manos pequeñas... ellas! yo misma.
Zulu con novia lejos y exnovia cercana (es la misma), valval (pinta su amor de esperanza cuando un puño a cerrado su corazón), TD (aman lo que puede ser pero odian lo que es), valm (identidad desconocidas afloran cuando un tercero no entorpece sino que aclara y acerca a las imposibles) magia (exótica muy diferente) girl (sorpresa con desconcierto y acierto incluido, un enigma muy delicioso.
Basta, basta... un besote y no tendré que decir nada más.
Hey oye no sé, lo más seguro es que nos volvamos a hablar el día menos pensado.
Hey tu mi ciber novia, mi lejana y tan cercana realidad, no llores...
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